Mira el mar infinito.
Sobre su pecho sale a navegar un navío
que despliega sus velas, incluidas las de gavia.
Su pendón ondea en lo alto mientras aumenta
su velocidad de manera majestuosa.
Debajo, las olas rivalizan,
rodean al barco, apiñándose,
con brillantes movimientos circulares y espuma.
Walt Whitman
Es un signo de valentía desplegar gavias en tu barco. Bonita imagen. Besos
ResponderEliminarHacia mucho tiempo que no leía nada de Whitman,gracias por recordarmelo, siempre me ha gustado
ResponderEliminarAbrazos
Siempre es bueno tener tan gratas visitas al blog.
ResponderEliminarSaludos